sábado, 14 de marzo de 2009

Diferencias

Muchas veces uno no se da cuenta de las comodidades o facilidades que tiene hasta que se ve sin ellas. Incluso hay ocasiones en que damos por hecho que algunas cosas deben ser de una manera y eso no es así: es simplemente que de ese modo es como a nosotros nos lo ofrecen, pero no todos tienen esa suerte.

Siempre he oído hablar de las formas de ser tan diferentes que hay entre la zona norte y la zona sur de mi país, y habiendo conocido a personas y ciudades de unos y otros sitios, a mí me pareció que la mayor distancia que hay entre ambas partes es la física. Hay gente de todos los colores en todas partes, pero sí que hay costumbres que pueden variar mucho de un lugar a otro.

Ya hace tiempo me llamó la atención que en la primera gran ciudad haya tanto estrés y tan poco en la segunda... pero las separan unos setecientos kilómetros o más, una tiene costa y la otra no, tienen problemas políticos un tanto diferentes... En fin, que ver diferencias entre ellas, aunque me parezca llamativo, no me extraña. Lo que sí me impacta es ver que ciudades que están la una al lado de la otra y son incluso de la misma comunidad autónoma puedan ser aún más distintas que esas dos.

Fue poco tiempo el que pasé en la ciudad de al lado, pero me bastó para darme cuenta de lo bien que nos tratamos aquí, al menos en comparación. Además también tengo datos de gente de allí en la misma dirección de los que he recogido con mi pequeña muestra (que no se resume sólo a ayer...). No sé qué puede hacer que una hora y poco -la distancia entre ambas- cambie tanto a la gente... pero desde luego eché de menos la amabilidad que me suelo encontrar por norma en mi ciudad.

Tal vez por eso guste tanto esto a otros, y yo no había sido capaz de apreciarlo... pero es que a lo bueno se acostumbra uno pronto, y en esa comodidad sólo se piensa en lo malo y en que se podría mejorar. Al menos gracias a esa experiencia ahora aprecio más a mis vecinos.